los azulejos van a volar temprano
van a darse por ser otra cosa en el mismo aire,
quizás fueran nuevas palabras
saliendo entonadas de tu boca también nueva,
estampándose en una nueva estampita
florecida de golpe en el aleteo
cayendo redonda y letrada en tus manos
ofreciéndote perdones innecesarios
que podrías pedir igual
porque el color es tan suave a los dedos
y la tarde tan mansa y desarmable
que rezar podría ser más bien cerrar los ojos
y recordar un pasado pasar que no es más
que otros azulejos olvidados
en una pared de labios mudos
que los pájaros no saben
volar ni atravesar.
3 comentarios:
Post viejito de mi blog
muy lindos tus escritos.
saludos!
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