hoy me desperté llena de gente, horrorizada. vos no estabas en ningún pliegue de mi día y yo tenía que levantarme.
entre empujones y tironeadas logré tomar un café. y entonces, por un segundo, levanté la vista y ahí estabas.
con tu sonrisa de malabarista caído, tan radiante y tan hermano. y pensé que éramos esos dos juguetes de otra época, yo con mi flor amarilla y vos con tu globo verde.
pero la ilusión se desvaneció sin misericordia.
solo pude repetir tu nombre muy bajito, para que nadie me lo quite.
y esperar, como siempre, a que aparezcas, y me salves.
5 comentarios:
Pues, aqui estoy
Me puedo tomar un avion a donde estar y abrazarte?
Increiblemente tierno. Me gustó mucho
Paz
Dios, es increìblemente hermoso!!!! habìa escrito un comentario antes, ahora no està.....llegò a destino?
Adiòs lucièrnaga, dormir hasta despertarnos.
gracias, muchas, a todos. y bienvenidos.
Publicar un comentario